Nunca entendí porque Hotmail me desmoraliza de esta manera. Si quiero cambiar la contraseña de mi cuenta, tengo que fingir haberla olvidado para que ellos tengan la gracia divina de dejarme poner algo más seguro para que ningún ex resentido, stalker o amiga curiosa tenga la posibilidad de revisar mi cibernética identidad. Me trata de irresponsable, de tarada, de inútil. No olvidé mi contraseña querido Hotmail, la quiero cambiar nomás, por qué necesitás rebajarme para hacerme un favor? Quién te crees que sos, yo?
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